
Hay días que te agarras a mi cuerpo como una enredadera. Otros, te separas violentamente como un cascote despidiéndose de su iceberg. Eres la tierra en el cielo y el hielo en la sopa. Podría vivir sin ti, pero no soy gilipollas. Ya no.
Posted in Fotos, Instagrafías, tagged cielo, hielo, Instagrafías, Tierra on 15 enero, 2013| Leave a Comment »
Posted in #spanishrevolotion, Cambio, Disidencia, Política, tagged absurdo, aire, Avaaz, CIE, derechos humanos, extranjeros, fronteras, Fundación Robo, Inmigrantes, Nacho Vegas, Tierra, Woodie Guthrie on 2 noviembre, 2011| 1 Comment »
Ayer andaba pensando que el aire que respira un tío de Dakar, Senegal, puede ser, al cabo de un par de flechitas del mapa del tiempo, el aire que respiro yo en Madrid, España. Lo mismo con los de Varsovia o Pekín, Ecuador o Argelia. Igual es una tontería lo que acabo de escribir pero también es una obviedad lo de “ningún ser humano es ilegal” y hay que recordarlo a cada rato. Nos gusta plantar fronteras por tierra y mar pero el aire que nos alimenta sobrepasa nuestro control aduanero, ése que se nos olvida cuando se trata de vivir de los recursos de los demás (como ya dije hace poco).
Hoy me entero por Lula de la campaña de Avaaz sobre (contra) los Centros de Internamientos para Extranjeros (CIE), lugares donde la norma es el maltrato y no hay control judicial (como Guantánamo). Y al mismo tiempo leo que el presunto próximo presidente promete que habrá que pasar un examen para ser español. Curiosa prueba cuando, viendo lo que hacemos, seguramente no hayamos aprobado aún el examen de ser humano.
Para apoyar la campaña de Avaaz, pincha aquí.
Suena Esta tierra es nuestra, una revisión del clásico de Woodie Guthrie a cargo de Nacho Vegas dentro del muy recomendable proyecto Fundación Robo.
La imagen, que tomé en Sol hace mes y pico, muestra una de las posibles pruebas del examen de españolidad.
Posted in Agua, Cambio, Disidencia, Política, Sostenibilidad, Tierra, tagged ¿Y por qué no...?, bono vasura, BP, Brasil, Chernobil, Citarum, Dead Kennedys, Dzerzhinsk, entorno, G-20, India, Indonesia, Polución, Rondonia, SICAV, Tierra, Yamuna on 24 mayo, 2010| 2 Comments »
El otro día, paseando por la red, me encontré con una bonita lista con los 15 sitios más tóxicos en los que vivir. Son lugares reales donde vive gente de verdad.
Hay un poco de todo. Ríos que se pueden pisar, aire que se puede cortar con un cuchillo, la isla de plástico de la que ya se ha hablado por aquí, Chernobil, bosques de los que ya no queda ni un árbol…
Hay quien sigue sosteniendo eso de que el cambio climático, si es que lo hay, no es cosa del hombre. Pues no sé, no soy científico, pero uno ve estas fotos y se queda con la sensación de que el hombre, entendido como especie, algo está haciendo para ensuciar su casa. Y la de sus descendientes.
Si ejerciésemos el turismo e hiciésemos viajes como se debe, o sea, para descubrir el mundo en que vivimos y las formas de vida que son ajenas a la nuestra, deberíamos incluir cualquiera de estos lugares en nuestras vacaciones de este año.
Desde luego, tendríamos buenas fotos para enseñar a familiares y amigos y, quizás así, nos dejaríamos de coñas a la hora de rechazar esa inofensiva bolsa de plástico o al exigir una política energética seria y responsable a empresas y administraciones.
Aquí sólo he colgado cinco de los 15. Se pueden ver todos en este link. De todos modos, se me ocurren otros sitios tóxicos en los que debe ser difícil respirar sin atragantarse. Por ejemplo, un dos tres responda otra vez: un bono basura, una reunión del G-20, una reunión de consejo de ministros en la que no se aprueba nada sobre las SICAV, el despacho donde se gestiona la solución al vertido de BP, un barco dedicado a cortar aletas de tiburón… ¿Se os ocurre alguno más?
Suena Holiday In Cambodia, Dead Keneddys.
También en ¿Y por qué no…?Posted in Citas, Libros, Tierra, Viajes, tagged alma, atracción, Hawai, Michel Tournier, Muerte, Paz, The Fall, Tierra, vértigo, Viernes o los limbos del Pacífico, Waimea Canyon on 7 abril, 2010| 1 Comment »
Comprendió que el vértigo no es más que la atracción terrestre que se ceba en el corazón del hombre que sigue siendo obstinadamente geotrópico. El alma se inclina perdidamente hacia esos fondos de granito o de arcilla, de sílice o de esquisto, cuya lejanía la enloquece y la atre al mismo tiempo, porque allí presiente la paz de la muerte”.
Rescatado de Viernes o los limbos del Pacífico, de Michel Tournier. El libro me pareció bastante coñacete pero me gustó mucho esta definición del vértigo porque retrata buenamente lo que a mí me pasa por épocas y en según qué lugares altos (será que mi alma es exquisita en sus inclinaciones).
Suena The Fall, Dead Beat Descendant.
La foto la hice en el Waimea Canyon (el Gran Cañón del Pacífico para los amigos de la comparación fácil), en la bien bonita isla de Kauai, en Hawai. No es que el lugar me diese mucho vértigo, pero fue por allí donde me encontré con esta definición leyendo este libro (gracias, madre). Eso fue en verano, pero hasta hace poco no he recuperado el libro y, con él, la cita. Que todo hay que explicarlo.Posted in Cambio, Disidencia, Hay algo aquí que va mal, Tierra, tagged El País, España, Francia, Leño, Natalidad, Población, Responsabilidad, Tierra on 15 marzo, 2009| 2 Comments »
El mismo periódico que decía antes de ayer que vamos a ser demasiados en el mundo en 2050, ayer se fijaba en las políticas francesas de fomento de natalidad y más o menos las proponía como modelo para aumentar los nacimientos en España. Entiendo que los conjuntos “mundo” y “España” no son iguales, aunque, hasta donde llego, el segundo habita dentro del primero. A partir de ahí, no entiendo nada.
Suena Leño, No lo entiendo.
Posted in Cambio, Citas, Lecturas de WC, Libros, Tierra, tagged Cabalgata de reyes, Dinero, Douglas Adams, Felicidad, Galaxia, Guía del autoestopista galáctico, Infelicidad, Logroño, Tierra on 7 enero, 2009| 3 Comments »
En los remotos e inexplorados confines del arcaico extremo occidental de la espiral de la Galaxia, brilla un pequeño y despreciable sol amarillento.
En su órbita, a una distancia aproximada de ciento cincuenta millones de kilómetros, gira un pequeño planeta totalmente insignificante de color azul verdoso cuyos pobladores, descendientes de los simios, son tan asombrosamente primitivos que aún creen que los relojes de lectura directa son de muy buen gusto.
El planeta tiene, o mejor dicho, tenía el problema siguiente: la mayoría de sus habitantes era infeliz durante casi todo el tiempo. Muchas soluciones se sugirieron para tal problema, pero la mayor parte de ellas se referían principalmente a los movimientos de pequeños trozos de papel verde; cosa extraña, ya que los pequeños trozos de papel verde no eran precisamente quienes se sentían infelices”.
Así empieza Guía del autoestopista galáctico, de Douglas Adams. Descacharrante. Tanto, que su lectura impidió mi asistencia a la cabalgata de reyes de Logroño.